El CAYAC de Ibeas, en el entorno de Atapuerca, muestra ‘La Diversidad Amenazada’ a través de la colección fotográfica de ‘Okaimal’
‘La Diversidad Amenazada. Naturaleza-Hombre-Cultura’ es una exposición de más de medio centenar de imágenes de la colección de fotografías de Eduardo Aznar ‘Okaimal’, que se podrá ver en el Centro de Acceso a los Yacimientos de Ibeas de Juarros hasta el 20 de diciembre, de forma gratuita.
MEH
El Museo de la Evolución Humana (MEH), dependiente de la Junta de Castilla y León, ha presentado esta mañana la exposición ‘La Diversidad Amenazada. Naturaleza-Hombre-Cultura’ producida por Fundación Telefónica en colaboración con el CSIC, y que se podrá ver en el Centro de Acceso a los Yacimientos (CAYAC) de Ibeas de Juarros (Burgos) hasta el 20 de diciembre, en horario de apertura del centro y de forma gratuita.
‘La Diversidad Amenazada’ quiere mostrar la biodiversidad natural y cultural del mundo actual a través de la colección fotográfica de Eduardo Aznar ‘Okaimal’ y explicar lo que perderemos si el ser humano no actúa con firmeza y celeridad para prevenirlo. La colección de fotografías de ‘Okaimal’, comisariada por el profesor de Investigación del CSIC en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, Esteban Manrique, quiere mostrar el cambio global sin precedentes al que estamos asistiendo y la necesidad de poner los medios para evitarlo.
En su afán por dominar la Tierra en su beneficio, el hombre ha olvidado sus orígenes y su dependencia del medio, esquilmando recursos y contaminando: los cambios que hoy está produciendo pueden ser ya irreversibles y las consecuencias desastrosas si no se pone un límite ahora mismo. La muestra quiere hacer ver las consecuencias, lo que perderíamos, si el ser humano no actúa con firmeza y celeridad. Son 51 fotografías, que se han articulado en las siguientes secciones: la tierra en cambio continuo y la diversidad, resultado de la evolución (diversidad de paisajes, diversidad biológica, fauna y flora); el hombre como especie, diversidad de tipos humanos (pueblos, etnias y culturas), adaptación y transformación del entorno (ganadería, agricultura y pesca); bosques, manglares y corales; el agua, un recurso vital (ríos y lagos); el antropoceno, un rápido cambio ambiental global (tecnología y sobreexplotación de recursos y gases de efecto invernadero) ocasionado por el ser humano; el cambio climático (deshielo), vulnerabilidad y adaptación; y “Aún estamos a tiempo”, que cierra la exposición con una puerta a tender una mano para evitar el desastre ecológico.
Vanishing World Diversity
La exposición forma parte del proyecto Vanishing World Diversity, que nace como respuesta a la amenaza para la rica biodiversidad de la Tierra y la extinción de infinidad de especies vegetales y animales, pueblos, lenguas y culturas, condenados a desaparecer por el modelo global hegemónico. La colección de fotografías tomadas a lo largo de casi medio siglo de viajes de ‘Okaimal’ por países de cuatro continentes ofrece un testimonio de los territorios, pueblos y culturas que van sucumbiendo a esta dinámica de destrucción.
Para alertar sobre esta enorme pérdida, Vanishing World Diversity quiere difundir en distintos soportes fotografías seleccionadas del archivo de ‘Okaimal’: ediciones limitadas (dieciséis volúmenes sobre cuarenta países), “Cuadernos de Viaje” (compendio en tres tomos de mayor tirada), exposiciones de fotografías, vídeos y banco fotográfico.
La diversidad natural y cultural, en peligro
En la larga historia de la vida sobre el planeta Tierra, el ser humano es un recién llegado cuya presencia en el planeta nos remontan a tan sólo unos 2,5 a 7 millones de años. Pero en su expansión sin precedentes ha provocado profundos cambios a escala planetaria. Hoy es responsable de alteraciones ecológicas irreversibles y de la extinción de numerosas especies, perturbaciones cuyas consecuencias desconocemos y que, posiblemente, terminen volviéndose contra nosotros mismos en un futuro no muy lejano.
La población humana en la Tierra ha experimentado un crecimiento extraordinario. En tan sólo medio siglo, del año 1950 al 2000, hemos pasado de ser 2.500 millones a 6.000 millones de habitantes. Ahora mismo se calcula que somos unos 7.400 millones de habitantes en el planeta. De éstos, 4.500 millones, más de la mitad, están en Asia y 1.100 millones en África. Para el año 2050, con la tasa de crecimiento actual, se prevén 9.000 millones de habitantes.
La necesidad de mantener a la población ha llevado a la explotación de los recursos naturales sin control y a la contaminación del suelo, aire y aguas hasta proporciones gravísimas. Estos cambios también afectan al clima y suponen una gran amenaza para la rica diversidad biológica que la Tierra alberga, provocando extinciones a una velocidad alarmante, y para el propio ser humano. Estamos asistiendo al efecto sobre la diversidad de los pueblos, sus lenguas y sus culturas, condenados a desaparecer por el proceso de la globalización, que homogeneiza los modos de vida independientemente de las características geográficas locales.
Desde que la Tierra comenzó a enfriarse hace 4.500 millones de años, los cambios en el ambiente han ocurrido de forma continua a lo largo de su historia y seguirán sucediendo, pero esos cambios dieron tiempo a la adaptación de las especies.