Noticias

Entérate de todo y más

El MEH se ilumina de verde hasta el 13 de diciembre con motivo de la ‘Cumbre del Clima’ que se celebra en Madrid

La fachada del Museo se ‘teñirá’ de este color desde las 20.00 hasta las 00.00 horas hasta que finalice la cumbre para sensibilizar a la ciudadanía sobre el problema del cambio climático. El pasado mes de octubre se iluminó de rosa para sumarse a la lucha contra el cáncer de mama

MEH

 

El Museo de la Evolución Humana, dependiente de la Junta de Castilla y León, se suma, dentro de sus acciones de Responsabilidad Social, a la Cumbre del Clima que se está celebrando en Madrid y se iluminará de color verde, el color que simboliza la lucha contra el cambio climático, hasta el 13 de diciembre, día en que finaliza la cumbre.

 

La fachada del Museo se iluminará de este color desde esta noche hasta el día 13 desde las 20.00 horas hasta las 00.00 horas. La Cumbre del Clima se está llevando a cabo en el Recinto ferial de Ifema de Madrid reuniendo a casi 30.000 personas de 196 países para tratar de coordinar e impulsar la acción mundial contra la emergencia climática.

 

Se trata de la segunda acción de este tipo que realiza el Museo de la Evolución Humana. Cabe recordar que en octubre se ‘tiñó’ de rosa para sumarse a la lucha contra el cáncer de mama y también escogió ese color para el folleto de su actual programación, que incluyó además diferentes charlas y encuentros sobre esta cuestión.

 

A lo largo de sus tres programaciones cuatrimestrales el Museo de la Evolución Humana da cabida a diferentes colectivos para desarrollar acciones culturales, artísticas y científicas que tienen en la inclusión su razón de ser.

 

El grito de la naturaleza

 

Hay que recordar otra acción del Sistema Atapuerca en 2016 con motivo del I Congreso Internacional de Medio Ambiente y Clima de 2016. En dicha ocasión se plantaron 700 majuelos como parte de un proyecto artístico. Esta iniciativa del SACE, en colaboración con la ONG ‘Un Bosque para el Planeta Tierra’, fue obra de la noruega Lise Wulff que quiso recrear el famoso cuadro ‘El grito’ de Edvard Munch, convirtiéndolo en un grito por la naturaleza que conciencie a la ciudadanía. En este proyecto internacional participaron un centenar de voluntarios, además de representantes internacionales de Noruega, Francia, Italia, Holanda y Sudáfrica y del propio Ayuntamiento de Atapuerca.